martes, 23 de junio de 2009

Sigo como un dálmata

Mi psoriasis sigue lentamente su curso. Ahora por lo menos no tengo en la cara aunque después tengo ronchas para dar y tomar, por todo, todo el cuerpo. De cabeza (incluidas orejas) a pies.

Es increíble lo que puede limitar una enfermedad que afecte a tu imagen. La semana pasada estuve todas las tardes metida en casa, tenía que quedar con alguna amiga pero para que te estén mirando (no las amigas sino la gente que encuentras a tu paso) preferí quedarme tranquilita. En el cole... pues bueno, los demás profes ya están al corriente y a los niños se lo dije desde el principio, me preguntan cosas sobre la psoriasis y todos los días comentan algo: "Te salió una ronchita encima del ojo, hoy estás mejor, el cuello es lo que más se te ve, ...."

Y mi madrileño... es un poco aprensivo el hombre, primero preguntaba si era contagioso, después que cada vez que nos vemos le entran a él también picores y lo último fue este finde, nos vimos en Astorga, hacía bastante calor, se pegó una paliza de viaje, puede ser, pero estábamos los dos desnuditos en cama y me salta que le da la impresión de que me supuran las ronchitas..... Me sentó.... mal, mal, me enfadé y todo. Ya noté yo otros findes que tenía las ronchas peor que le daba cosa abrazarme sin ropa, pero y yo qué? Para mí también es duro para un día que podemos vernos tener el cuerpo como lo tengo, yo también estoy harta de verme así.

jueves, 11 de junio de 2009

La tía abuela de Fernando Alonso

Este finde estuve con mi madrileño por Astorga, la ciudad que vio nacer nuestro amor. Y desde que nació nunca volvimos a quedar allí. A mí me queda a tiro de piedra pero como mi madrileño está más atareado que yo siempre me movía yo más.

Nos alojamos en un hotel junto al ayuntamiento, un poco carillo para ser un tres estrellas, pero leyendo en el libro de visitas ya nos dimos cuenta, era un hotel con pedigrí, "Un saludo de la tía abuela de Fernando Alonso", si es que.... porque no le ponen una cámara delante a la señora, que sino nos cuenta como era Fernandito cuando era un bebé.

Mi madrileño como siempre encantador, es para comérselo a besos, diciéndome a todo momento lo guapa y bonita que soy, y eso que con mi psoriasis guttata parezco un dálmata, ahora cada vez más en la cara, qué suplicio!

sábado, 6 de junio de 2009

Psoriasis guttata

La pereza es unos de mis defectos, lo reconozco, llevo más de una semana diciendo de hoy no pasa y hoy, ya cabreada, a la una de la mañana me decido.

Estos días, sin que sirva de excusa, estuve liada, que si médico de cabecera, que si dermatólogo, me salieron unas ronchas primero en la cara y después en todo el cuerpo. La médico de cabecera creyó que sería una alergia, me pinchó corticoides, se me pasó pero brotó con más fuerza que antes. Ante eso, visita al dermatólogo y diagnóstico: psoriasis guttata o psoriasis en gotas. Este es el aspecto que presenta mi espalda.

Y ya llevo así casi tres semanas. Pensé que pasaría pronto pero leyendo en foros sobre el tema sé que no y que aunque pase puede brotar en otra ocasión.

Es una enfermedad genética aunque no se sabe de nadie de mi familia que la tuviera. Este tipo de psoriasis suele aparecer después de una amigdalitis, como fue mi caso. El estrés psicológico tampoco ayuda y yo de esto tengo un rato.

EDITADO: fotos de psoriasis en el cuello y en la espalda.